Oídio es el nombre de una enfermedad de las plantas, y del hongo que la produce.
Su principal síntoma es el hecho de que las hojas se cubren, principalmente en la parte axial, con una capa algodonosa de micelio grisblancuzco a blanco en forma de estrella. En un ataque fuerte las hojas se ponen amarillas y posteriormente se secan.
La mayoría de las veces su aparición está causada por abonos excesivamente cargados de nitrógeno, condiciones de poca luz, exceso de humedad, abuso de tratamientos químicos, o una mezcla de éstas causas. La pobreza genética también es una causa a tener en cuenta.
Se suele aconsejar tratar con preparados vegetales como el purín o decocción de Cola de Caballo (Equisetum hyemale) o purín de Salvia (salvia officinalis). Una receta fácil de preparar, que me aconsejo Paco @conlospiesenlahuerta , es preparar un 1% de bicarbonato y un 1% de aceite vegetal (soja, girasol..) en una disolución con agua, que posteriormente se fumiga sobre las plantas afectadas.
El oídio puede fectar a muchas plantas de jardín, como rosas, claveles, crisantemos, begonias y en el huerto se ceba sobre cucurbitáceas (melones, pepinos etc.), fresas, vides y tomateras. En frutales los más afectados son los manzanos, melocotoneros, ciruelos y albaricoques. Variedades débiles de menta también se pueden ver afectadas.
Podéis dejar en los comentarios informaciones sobre vuestras experiencias con este hongo.

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