Habría que saber, para empezar, hasta que punto le puede entrar el agua por la tapa, porque eso puede llegar a ser un problema gordo. Pero, por lo que dices, más parece que esté sufriendo de sequía. La forma más simple es mover un poco la capa superficial y, si en esos 20-30 cms. está seco, la cosa está bastante clara. Si aún tuvierais dudas, seguir profundizando un poco más. Debería notarse claramente que las zonas siguientes (a unos 40-50 cms. de la superficie, tienen un buen porcentaje de humedad. No tienen que estar chorreando, pero si con una humedad muy clara.
Por supuesto el segundo indicador es la actividad. Si la altura no ha cambiado, es decir si el montón no baja, lo más probable es que sea por esa sequedad.
Una vez confirmado, la cosa está clara: recoger ortigas (evitar tallos y raíces), trocearlas, ponerlas a remojo un par de días, meter después la batidora y conseguir un «batido de ortigas». Colar y añadir un litro de «batido» por cada nueve de agua. Esos diez litros se añadirían al silo de compots MUY POCO A POCO (Recordad que sugeríamos usar un cubo con agujeros pequeños para que el agua se fuera flitrando despacito). Iríamos cubriendo toda la superficie del silo, haciendo incapié sobre todo en la periferia, dejando el centro para el final. Lo habitual suele ser añadir unos 100 litros (10 cubos) para que quede bien de humedad, PERO SI ESTA MUY SECA probablemente haya que repetir la jugada a los pocos días.
Si realmente el problema era de sequedad, se notará claramente que se reactiva el compost y el montón baja. En esta época no será lago inmediato, puede que tarde un par de díaso tres. En verano sería casi instantáneo.
Es difícil pasarse de humedad, pero de todos modos, mejor ir poco a poco.
Ya nos contaréis.