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Entrenar en agua.

Entrenar en agua, bien sea nadando o haciendo diversos ejercicios, y tanto en piscinas como en el mar, lagos, ríos, etc., será siempre un ejercicio EXCELENTE para l@s atletas. No obstante hay que tener prudencia, pues ciertos excesos podrían acarrearnos problemas de lesiones, y de seguridad.

La natación nos procura importantes beneficios para correr, tal vez el más importante sea la enorme mejora que proporciona al sistema cardiovascular. La natación es un ejercicio que permite mantener muchas pulsaciones durante largo tiempo, y la respiración adquiere gran potencia y coordinación, por si fuera poco nuestras articulaciones no se sobrecargan, y nos beneficiamos del importante efecto contra la inflamación que el agua posee, lo cual va de perlas a cualquier atleta, y más aún a l@s veteran@s. El braceo al correr es un impulsor muy importante, con la natación lo agilizamos y potenciamos ampliamente.

Como dije al principio de este artículo hay que ser prudentes, a pesar de los grandes beneficios de este ejercicio, si no somos nadadores habituales y osamos empezar demasiado fuerte, podemos sufrir lesiones en forma de tirones y tendinitis. Poned especial cuidado en el impulso con las piernas, si pateáis muy bruscamente podéis lesionaros los isquiotibiales, y en el estilo braza los abductores. Este problema puede evitarse en gran medida usando aletas, ahora venden unas pequeñitas que van genial.

No quiero terminar este artículo sin poneros alerta sobre los peligros del agua, sobre todo del inmenso poder del mar. Desgraciadamente en mi vida he tenido ocasión de conocer de cerca el lado trágico de este elemento. Lo peor fue cuando perdí a un querido primo en una playa italiana, era un excelente nadador, pero ignoraba la poderosa resaca que se daba en aquella zona, por lo que se vio tragado por las olas sin remisión. En otro episodio yo mismo estuve en serios apuros, zarandeado por las poderosas olas del cantábrico, sólo el gordo neopreno que llevaba impidió que acabara igual que mi primo. El tercer aprieto tuvo un desenlace más feliz, con sólo diez añitos un amigo cayó en una balsa, de la que no se podía salir por tener los bordes altos y verticales, para rematar el agua estaba helada, y mi amigo casi no sabía nadar, fue una gran suerte que allí cerca encontrara una larga rama de árbol, pudiendo con ella salvarle el pellejo. Sin duda muchos de vosotros habréis sufrido ya casos parecidos con lo que tendréis experiencia, los que no, procurad evitarlos, pueden llegar a ser harto desagradables.

Desde luego no es mi intención causar alarma ni mucho menos, hoy en día las piscinas son muy seguras, y las lagunas y el mar también si somos prudentes. Disfrutad del agua y sus enormes beneficios, y sin duda obtendréis importantes mejoras para correr. Un buen truco para recuperarse rápidamente después de duras competiciones, es hacer varios entrenamientos de natación tras la carrera, no sólo nos recuperamos mejor, si no que además damos continuidad a nuestros entrenamientos.

Un saludo pececill@s.

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2 Responses to Entrenar en agua.

  1. Pingback: sasha

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